Hay veces que la energía se escapa poco a poco y en lugares insospechados, como en un interruptor que nunca se apaga, en una calefacción mal regulada, o en las ventanas mal aisladas por donde se escapa el calor. Sin embargo, en otras ocasiones no se trata de fugas, sino de consumos difíciles de controlar, como puede ser un suministro muy dependiente del mercado, un sistema energético obsoleto, o una actividad empresarial con altos consumos.
Ahorrar energía ahora mismo es el reto de la mayoría de las empresas, que deben revisar sus sistemas energéticos y de producción, detectar ineficiencias energéticas y sobre todo analizar cuáles son sus hábitos de consumo, lo que puede ser clave en estos momentos de precios disparados.
La apuesta por el autoconsumo
Cómo conseguir producir lo mismo consumiendo menos energía, será algo que requerirá adoptar medidas y llevar a cabo inversiones en función del sector de cada empresa y su tipo de consumo.
Una de estas medidas debe ser hacer un estudio interno, una auditoría, para detectar gastos que podrían ser suprimidos y conocer los hábitos de consumo de la empresa. El siguiente paso sería la renovación de los equipos, la revisión de los contratos de suministro, y la evaluación y el estudio de las instalaciones para cambiarnos al autoconsumo.
Con el autoconsumo las empresas logran alcanzar un ahorro de más del 60% en sus facturas, al mismo tiempo que incrementan su independencia energética, y les permite asegurarse un coste fijo de la energía generada durante toda la vida útil de la instalación, (25 – 30 años).
Entre el abanico de soluciones propuestas, también habría que contemplar la revisión y el ajuste de las potencias de suministro contratadas, el ajuste de las tarifas a los horarios reales de trabajo y la eliminación de consumos ocultos. Además de diseñar un plan de eficiencia ajustados al tipo de producción y características de cada empresa.
Las empresas deben abordar mas pronto que tarde, sus estrategias de eficiencia energética. Europa se ha marcado como reto que en 2050 desaparezcan las emisiones de CO2. La necesidad de tener que ir apostando por energías limpias conlleva planificar inversiones y transformaciones a medio y largo plazo.
Se trata de transformaciones que requieren de inversiones importantes pero que confluyen en un ahorro.
La guerra de Ucrania es una situación que ha puesto en evidencia la dependencia y ha puesto en peligro a muchas empresas.
Empresas como Alfa Global aseguran a las empresas que les contratan la instalación de paneles solares, un coste de generación fijo de 0,02 €/kWh, frente a los 0,26 € a los que se está pagando actualmente el kWh durante los próximos 30 años. Además, te asesorarán sobre las ayudas actuales y/o financiación que puedas necesitar para acometer la inversión inicial. Una oportunidad única que no se puede desaprovechar.
Obtén más información en el 900 533 611 o envía un correo a autoconsumo@alfaglobal.es